CIUDAD ESPAÑOLA
Desde que fue concebido en 1929, El Poble Espanyol ha sido considerado como un espacio diferente, único en la ciudad. Su trazado urbano – un verdadero pueblo con calles y plazas, sin tráfico rodado y en el entorno natural de la montaña de Montjuïc – ha ayudado a crear un microcosmos especial, ofreciendo una invitación a salir de la rutina diaria de la ciudad.